Vamos a corretear los sueños,
sigámoslos por la alfombra de nuestras pesadillas;
vamos a perseguir los sueños,
vamos a inventarlos;
despertemos de esta modorra espiritual
y podemos todo lo que nos molesta,
todo aquello que tapa la visibilidad
de la alegría...
Vamos, vamos, vamos:
a corretear a los fantasmas
de la infelicidad;
no dejemos que respiren
pongámosles coto
y asfixiémosles con el vino
de nuestro amor...
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