Hoy es el cuarto día de la convocatoria que me extendiera el poeta mexicano, Juan Armando Rojas Joo a publicar un poema diario durante cinco días consecutivos invitando a otros poetas a hacer lo mismo. Hoy invitaré al poeta colombiana, Gabriela Ortiz ha publicar un poema diario durante cinco días e invitar a otros poetas a hacer lo mismo.
EL VIAJERO DE LO PROFUNDO
Me monté
en el automóvil de la suerte
buscando
la muerte o la fortuna,
viaje por ciudades ajenas,
barrios, pueblos
y aldeas muy lejanas.
en el automóvil de la suerte
buscando
la muerte o la fortuna,
viaje por ciudades ajenas,
barrios, pueblos
y aldeas muy lejanas.
Adicto a la penumbra
fui barbero, mecánico,
cocinero y sastre.
fui barbero, mecánico,
cocinero y sastre.
Dilapidé mi tiempo
consagrándome
al arte de lo oculto,
descifrando leyendas,
misterios, y crímenes paganos
en las piedras.
Muros de reinos herméticos
ya olvidados.
consagrándome
al arte de lo oculto,
descifrando leyendas,
misterios, y crímenes paganos
en las piedras.
Muros de reinos herméticos
ya olvidados.
Y ahora,
viejo, pobre y poeta
de menor cuño,
soy marinero del cielo,
náufrago de lo profundo,
de lo que preocupa
al hombre
que volvió del viaje
sin oro, sin luz, sin suerte…
Sin equipajes.
viejo, pobre y poeta
de menor cuño,
soy marinero del cielo,
náufrago de lo profundo,
de lo que preocupa
al hombre
que volvió del viaje
sin oro, sin luz, sin suerte…
Sin equipajes.
Obra del pintor veneciano, Canaletto.
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