Cada día decimos adiós
Cada decimos adiós.
Cada día enjugamos nuevas lágrimas.
Cada día prometemos en vano
no olvidar algún instante.
Cada día dejamos un poco de nosotros
bajo la sombra de los árboles,
en el sabor de los besos,
en la espera del sueño en la madrugada,
en la inútil mirada hacia un esquivo porvenir.
Cada día enjugamos nuevas lágrimas.
Cada día prometemos en vano
no olvidar algún instante.
Cada día dejamos un poco de nosotros
bajo la sombra de los árboles,
en el sabor de los besos,
en la espera del sueño en la madrugada,
en la inútil mirada hacia un esquivo porvenir.
Cada día
pensamos que será mejor mañana,
que la muerte era una mentira de la abuela
para hacernos terminar el almuerzo;
que la dicha nos espera al otro lado del camino
al despertar.
pensamos que será mejor mañana,
que la muerte era una mentira de la abuela
para hacernos terminar el almuerzo;
que la dicha nos espera al otro lado del camino
al despertar.
Cada día
se pueblan de fantasmas los caminos
mojados de penumbra.
Cada día se aleja para siempre
un pasado que no termina de morir.
Cada día logramos al fin cerrar los ojos
pensando en una aurora diferente.
Cada día decimos hasta pronto,
y nos mentimos.
se pueblan de fantasmas los caminos
mojados de penumbra.
Cada día se aleja para siempre
un pasado que no termina de morir.
Cada día logramos al fin cerrar los ojos
pensando en una aurora diferente.
Cada día decimos hasta pronto,
y nos mentimos.
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