Se inicia el insomnio
Arde el rojo de las antiguas lunas
que regresan para prestarle
al lobo sus ojos.
Susurra una voz
que va y ya está de vuelta
Adentro de la luz, hechizo y guerrero
son un latido silencioso
que por la mañana partirá
solo
lastimado, agradecido,
muerto
porque los muertos también sueñan
con una muchacha
que descubre el insomnio
y que ya no reza.
Arde el rojo de las antiguas lunas
que regresan para prestarle
al lobo sus ojos.
Susurra una voz
que va y ya está de vuelta
Adentro de la luz, hechizo y guerrero
son un latido silencioso
que por la mañana partirá
solo
lastimado, agradecido,
muerto
porque los muertos también sueñan
con una muchacha
que descubre el insomnio
y que ya no reza.
©® Susana Inés Nicolini
Sue_*
Sue_*
(Derechos Reservados)
Fotografía - Jan Saudek
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